Mark Knopfler @ Palacio De los Deportes, Madrid

El pasado jueves 3 de abril, fui graciosamente invitado por mi hermano al concierto de uno de esos viejos rockeros, a los que, la verdad, yo creo que es necesario ver en directo alguna vez en la vida, y mereció la pena. Era Mark Knopfler, uno de los más importantes y talentosos guitarristas vivos, alma mater del grupo Dire Straits y con una carrera en solitario muy a tener en cuenta. Para los que no conocen, pues es rock ochentero, ese tipo de rock en mayúsculas, de ese que no necesita subtipos para calificarlo, el eterno, que en mayor o menor medida a todos gusta, porque está dentro de todos, y es que poca gente habrá que al menos no haya tarareado alguna vez el viejo "Sultans of Swing". Pues a ese íbamos a ver, la gira se suponía que era de presentación de su último álbum "Kill to Get Crimson", posiblemente de los más discretos para público y crítica de su carrera en solitario, obviamente, no era eso lo que más nos interesaba, prueba de ello es que había tan solo un par de temas de ese disco, no por ello menos válidas, ya que en directo todo suena mucho mejor, y más si se acompaña de esa flauta travesera e intros como "Women of Ireland", además de estar acompañado por una banda que sabe lo que se hace, con el viejo compañero de fatigas Guy Fletcher, u otros más recientes como el eficaz Richard Bennet. Y es que es mágico eso del directo, porque temas de algún otro trabajo anterior como "Marbletown" o "Hill Farmer's Blues" sonaban de auténtico lujo, y eso que a priori podían no ser tan demandadas como las viejas de los Straits, que también las hubo, no podían faltar "Romeo & Juliet", "Telegraph Road", o el ya señalado "Sultans of Swing". También hubo espacio para esos temas más celebrados de su composición personal, que también los hay, así lo prueban "Why Aye Man", "What It Is" o la siempre increible "Speedway at Nazareth". Para los bises finales se dejaron perlas que terminan de poner a la afición en pie como "Brothers in Arms", "So Far Away" o la vieja y entrañable despedida "Going Home". En fin que se podía haber hecho mejor, siempre se puede, pero para mi fue un recital bastante redondo, y para muestra de un momento molón, un botón: